Eres mi visita numeroo...

viernes, 23 de diciembre de 2011

Cálido y adorable ambiente navideño...

Bloggeros, ¡¡ha llegado la navidad!!
Y me sorprendo al descubrir en mí una ilusión y una alegría quizás aún mayor a las de cualquier otro año.
Lejos de perder la emoción y convertirme en un fantasma que no siente ni padece, voy creciendo y cada vez aprecio más ésta festividad.
Llena de luces y de alegría, en estas fechas el frío parece un vacuo disfraz del calor navideño. Sólo hay que mirar a los niños: ya no sólo sonríen sus labios, también lo hacen sus ojos. Las luces multicolores se reflejan en sus ojos, brillantes muestras de emoción.
Gran Vía de Bilbao, Vizcaya.
La magia se ve en todos nosotros, en cada rincón y en cada calle. Al margen de la crisis, los estudios, el paro, la pobreza... sólo hay que pasear por las calles para sentirte alejado de todos los problemas, apreciar la vida y su color. Voy paseando por la gran vía de Bilbao, y todo me parece más bonito, más mágico, con más vida. La gente en éstas fechas es más caritativa, y la moral vuelve a cobrar sentido en ellos... Grandes familias se reúnen a pasar juntos éstos días, compartiendo comidas y risas, cenas y juegos. Sacrificamos hasta el último euro para dar a nuestros seres queridos un regalo el día de navidad, y el día que más se presenta la magia, es el 6 de enero. En las casas con niños, se puede convertir éste día en el mejor día del año. Los niños impacientes sufren insomnio, y los padres juegan a ese indescriptible juego ilusorio que son los Reyes Magos. 
Quien no cree en la navidad, que no se engañe. No se revela ante una invención comercial con cobertura religiosa, no es un acto de valentía contra las mentiras y los errores. Está apartando de su vida a una de las costumbres más bonitas de éste planeta, una tradición que sólo perjudica al que no puede sentirla. ¿Qué importa su origen? ¿Si se cambió para que no coincidiera con el solsticio de invierno? ¿Qué más da? ¿De verdad lo convierte en un engaño, en una patraña de la que no hay que formar parte? Hoy en día, ateos, agnósticos y creyentes celebran todos juntos la navidad. Ya no es sólo una celebración de un nacimiento, es nuestra tradición, nuestra vida, nuestro mundo.


miércoles, 21 de diciembre de 2011

Mi camino. :)

Salía buscando una esperanza, una luz, un destello, un suceso que me hiciera ver brillar las estrellas bajo las incesantes luces  brillantes de la ciudad. Caminé y caminé encontrando muchas cosas a mi paso.
Algunas fueron buenas, y me aferré a ellas esperando que me acompañaran a lo largo del camino.
Otras desde lejos veía su veneno y las evité a toda costa.
Incluso hubo disfraces misteriosos que no sabía si evitar o abrazar, y me costó ver cómo eran en realidad, quitarles el disfraz...
Fue un camino interesante, unos dirían que horrible por todas las veces que tropecé, los venenos que no pude evitar o incluso las ocasiones en que me perdí.
Sin embargo, es una forma de verlo deprimente, pesimista e irreal. Es quitar todo lo bueno y quedarse con lo malo. 
Yo ni siquiera cambiaría nada de lo que encontré. Sin los venenos, los disfrazados, las noches en las que me perdí porque ya no me alcanzaba las luces de la ciudad.... No hubiera sido un camino interesante. Esas cosas me hicieron probarme a mí misma, hizo que apreciara las demás cosas buenas a las que traté de aferrarme, y además fui elaborando un bloc de notas con instrucciones y apuntes para no volver a caer en los mismos errores.
Al fin, encontré lo que buscaba, y encima pude ver que todo había merecido la pena. Cada segundo vivido, cada latido, cada caída y cada sonrisa.



Twitter: Lorenaa1993

sábado, 17 de diciembre de 2011

Brújula moral.

Este año, sólo quiero pedir una cosa para el día 6 de Enero... una brújula moral. 
Creo que si existieran habría muchos menos problemas en el mundo. Simplemente abrir una pequeña tapa, y mirar dónde apunta una flechita roja... y sabría qué debo hacer, qué cosas no he debido hacer, y cambiar mi actitud en los aspectos que sean necesarios...
Algunos, nos pasamos la vida arrepintiéndonos de haber hecho ciertas cosas, o ser de una determinada forma en casos específicos, y nos preguntamos reiteradas veces si realmente es tan malo como lo vemos, si está mal... Con ésta brújula, con sólo mirarla sabría la respuesta a todas esas preguntas...

lunes, 12 de diciembre de 2011

No quiero querer, quiero no querer...

En silencio no busco, me escapo
intento captar miradas furtivas que puedan ser cómplices...
Corro y te esquivo, tratando de encontrar a alguien
que me tienda la mano en este inhóspito paraje...





Por desgracia, hay pocas manos aventureras dispuestas a 


apoyarte
                               ayudarte
                                                               o simplemente estar ahí...


SIN NADA A CAMBIO.


SIN PROBLEMAS.


SIN FALSEDADES...



domingo, 11 de diciembre de 2011

Aquí estoy una vez más...

Esta vez no tengo una idea específica sobre lo que escribir, no me apetece dejar un escrito más al estilo de un cuento-metáfora o historieta-con moraleja. De lo que realmente me apetecería escribir, es de los temas que acucian mi vida día tras día. De la universidad y de que no he estudiado como debería (siiii, ahora me pondré las pilas.... xD), y más bien de esa persona que me trae de cabeza, que jamás me entenderá, y al que supongo que perdoné porque "el tiempo hace del odio algo inerte", y que le quise porque un día fue alguien diferente... Pero paso.
Incluso me apetecería desahogarme explicando a todos aquellos (mejor dicho a todas aquellas) que creen que soy de una determinada forma (que lo más probable es que en su imaginación me vean con un tridente y cuernos rojos); que se equivocan, que realmente no soy así y que las cosas no son como las ven/como se las han contado... que me gustaría demostrar a los que piensan cosas de mí que no son ciertas que realmente no soy así... pero se que es darle demasiada importancia al qué dirán, y que debería vivir mi vida desatendiendo las críticas ignorantes o mal informadas...

Sin embargo, explayarme en esos temas, que no le importan a nadie más, e incluso que podrían comprometerme según quién los lea, no es lo más inteligente por mi parte...
Así que aquí me veis, haciendo una entrada completa con simples divagaciones sobre qué debo escribir...
Y como en la vida misma, llega el final y no sólo no he podido hacer mi elección sino que tampoco me ha dado tiempo de llevarla a cabo...
Con una moraleja parecida a mi anterior escrito, descubro una vez más (y esta vez sin premeditación), que debo dejar de preocuparme por mi vida, por planearla, y por tratar de moldearla según las normas morales, tratando de alcanzar la legitimación perfecta, y comenzar a vivirla...

viernes, 2 de diciembre de 2011

Gotas de lluvia...

Y no paran de caer. Una a una, poco a poco, las gotas van cayendo del cielo.
Algunas se estrellan contra mi ventana, las veo morir y alzar un último grito mientras la gravedad les atrae hacia su muerte final.
Otras tienen una vida más larga, y finalmente chocan contra el suelo. Caen sobre agotados transeúntes, sobre imparables máquinas que recorren las carreteras...
En su nacimiento todas pensaron lo mismo: ¿Qué me deparará el futuro?
¿Seré popular, y entre miles de gotas, recorreré las montañas desde la cima hasta las faldas hasta alcanzar mi final rodeada de personas que me quieren, viajando todas hacia el mar? ¿Caeré sobre alguien importante? ¿Le arruinaré el peinado a alguna jovencita angustiada? ¿Veré Roma, París, Nueva York, o Tokio? o incluso... ¿Recorreré el cuerpo de Angelina Jolie?
Y sin embargo, no se dan cuenta de que mientras se hacían todas estas preguntas su vida YA estaba pasando, y se estrellaban contra mi ventana sin el final que esperaban, y sin haber vivido lo que les rodeaba.
 Una a una, han desaprovechado su momento, y la gota de Roma, la de Nueva York o la que... humedeció a Angelina Jolie, han alcanzado su final sin mucha demora, al igual que la rebelde y marginada que cayó sin miedo sobre un desierto, sin nada más que ver aparte de arena.
Todas, en posición de igualdad, han tenido el mismo fin. Y nosotros, como gotas, malgastamos nuestras vidas con tontas discusiones y preocupaciones, acomplejados por meras arrugas e inexistentes kilos de más. Suspirando, todos anhelamos la vida de aquél, aquél que lo tiene todo, que nunca sufre; y uno a uno, todos mirando de todo menos lo que importa, vamos cayendo y perdiéndonos poco a poco.